En primer lugar, podemos definir el bienestar emocional como el sentimiento que tiene una persona de encontrarse bien en relación con su vida, entorno, actividades y consigo mismo. Es decir, siente que de alguna manera tiene una actitud positiva ante la vida.
Y aunque no lo creas existe una relación clave entre el desempeño profesional y el bienestar emocional, y pese a que se pueda pensar que son dos dimensiones distintas ambas están relacionadas. Una persona que se siente bien tiene un desempeño profesional mejor y esto afectará a su empleabilidad y búsqueda de empleo.
¿Cómo el bienestar emocional influye en la búsqueda de empleo?
En un proceso de búsqueda de empleo debemos tener esa estabilidad emocional que nos permita analizar y tomar decisiones con plena serenidad y coherencia. Cuanto más consciente seas de la importancia del bienestar emocional, y de que se trata de un eje fundamental en la búsqueda de empleo, mejores resultados obtendrás.
De ese modo, debemos abandonar las actividades que nos restan energía y nos hacen perder el foco en nuestro objetivo final: encontrar un nuevo proyecto profesional.
Es muy importante trabajar el autoconocimiento y la motivación, eliminando esos pensamientos negativos como el “no puedo” o “no soy capaz” que lo único que hacen es limitarte y perjudicarte emocionalmente. Con esfuerzo y constancia se puede conseguir el objetivo, y aunque no salga a la primera, es necesario intentarlo y crecer.
La situación de desempleo se puede acompañar de momentos de frustración, ansiedad y desesperación si el empleo no se consigue pronto, y hay que evitar caer en la teoría del “todo vale” que nos llevará a puntos emocionales negativos de inseguridad o vacío.
Toma conciencia de tus necesidades emocionales y busca los recursos que te ayuden a afrontar las exigencias diarias de tu día a día, es un trabajo que no solo te servirá para buscar trabajo sino también para ser feliz en él.