Los trabajadores tienen diversos derechos que facilitan la conciliación laboral y familiar; y a su vez, las empresas cada vez están más concienciadas sobre la necesidad de implantar estas políticas, por su bien y el de sus trabajadores. Incluso, es un factor que influye de forma decisiva en la imagen de la empresa de cara al exterior.
A continuación, te detallamos los derechos que otorga la conciliación laboral y que podrás solicitar a tu empresa:
- Permisos retribuidos: matrimonio, maternidad, paternidad, lactancia, vacaciones, días de asuntos propios, cambios de domicilio, enfermedad, hospitalización y fallecimiento de familiares hasta segundo grado. También tendrás permiso retribuido si te ausentas por una acción o labor sindical o por motivos inexcusables como es asistir a una mesa electoral.
- Permisos no retribuidos: excedencias.
Además, tienes la posibilidad de negociar con tu empresa una reducción de jornada en la que tu salario se reducirá proporcionalmente; o una adaptación de tus tareas a tu vida familiar a través de:
- Turnos intensivos.
- Flexibilidad horaria o cambios de turno.
- Teletrabajo.
La conciliación laboral y familiar debe favorecer que el trabajador tenga unas condiciones beneficiosas a la hora de desarrollar su carrera profesional sin perjuicio de su vida personal y familiar. Y de igual forma, debe darse en hombres y mujeres para conseguir una participación equitativa de ambos tanto en el mercado laboral como en la vida familiar.
Además de las facilidades que nos ofrezca la empresa, es importante llevar a cabo una organización del tiempo y de las tareas que tenemos que realizar.
- Crear un calendario de tareas. Deberás incluir tareas profesionales, personales, familiares y sociales; con actividades programadas o tiempo reservado para dedicar a determinadas tareas.
Este calendario debe hacerse de forma conjunta con tu familia por un lado, y con tu equipo de trabajo por otro. Todos forman parte de esa conciliación y son corresponsables de que funcione.
- Priorizar tareas. Antes de crear este calendario, debéis aprender a priorizar las tareas más importantes o urgentes; y el reparto debe fijarse de forma equitativa y coherente.
- Evaluar resultados. Las tareas deben fijarse y evaluarse continuamente, para ver si se están llevando a cabo de forma adecuada o podemos mejorar la organización.
- Informar a tu entorno sobre tus planes. Si tu entorno, tu equipo de trabajo y tu familia conocen este calendario de tareas, se evitarán circunstancias no previstas que te generen estrés.
- Delegar o externalizar tareas. Con cierta ayuda podrás dedicar parte de tu tiempo libre a determinados proyectos familiares o laborales, dependiendo de las circunstancias.
- Simplifica tareas y evita desplazamientos, por ejemplo, haciendo la compra online, o realizando tus gestiones de forma telemática.
- Aprende a desconectar. Para que tu productividad sea mayor y tu tiempo en familia sea de calidad debes aprender a desconectar del trabajo cuando estás con la familia, y viceversa.
El efecto de una mala conciliación puede llevar a causarnos estrés, y derivar en otros problemas. Por este motivo es importante que tomes en serio y pongas en marcha cualquiera de las ayudas que estén a tu alcance.